Opacidad y evasivas en comunicado sobre presunta actuación policial irregular del video controversial y añejo que circula en las redes.
El reciente comunicado emitido por la Secretaría de Seguridad y Paz de Guanajuato, en relación a la difusión de un video donde presuntamente participa un elemento de las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado, deja un sabor amargo y más preguntas que respuestas. Si bien se anuncia el inicio de una investigación interna, el texto se caracteriza por un lenguaje evasivo y una preocupante falta de concreción.
En primer lugar, llama la atención la insistencia en que el video es de fecha anterior al ingreso del presunto implicado a la corporación. ¿Acaso esto lo exime de responsabilidad? La ciudadanía merece saber si la persona en cuestión fue investigada adecuadamente antes de ser incorporada a las fuerzas de seguridad.
En segundo lugar, se afirma que «no se confirma de manera clara su identidad, ni participación directa». ¿Qué grado de «claridad» se requiere para iniciar una investigación seria y contundente? Esta ambigüedad genera la sospecha de que se busca minimizar la gravedad del asunto y diluir la responsabilidad del agente.
En tercer lugar, aunque se menciona que se procederá con las «sanciones legales correspondientes» en caso de confirmarse la participación del agente, no se especifica qué tipo de sanciones se aplicarían. Esta falta de transparencia alimenta la desconfianza ciudadana y la percepción de impunidad.
En definitiva, el comunicado de la Secretaría de Seguridad y Paz se queda corto. En lugar de transmitir un mensaje claro y contundente de rechazo a las conductas inapropiadas, se percibe un intento por proteger la imagen de la institución a costa de la verdad y la justicia. La ciudadanía exige transparencia, acciones concretas y un compromiso real con la rendición de cuentas. El Gobierno de la Gente debe dejar de lado las ambigüedades y asumir la responsabilidad que le corresponde en la construcción de una seguridad pública basada en el respeto a los derechos humanos y la dignidad de todas las personas.
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