G. Saúl García Cornejo
La verdad, que, en el sistema político mexicano, cualquier cosa puede pasar. No es de Perogrullo, sino se trata de una sentencia, labrada en piedra. No importa el color de quien cree o dice mandar, sino de los usos y costumbre añejos y hasta rancios, pero ahí están.
Por ahora, lo más lamentable en la vida reciente, es la desgracia causada por el huracán Otis. Qué a querer o no, pone a prueba -una vez más- al régimen magenta. (Como otros ejemplos: la Pandemia que originó el COVIT, los giros del sistema de Salud Pública, la crisis económica y política, y un largo etcétera).
¿Es un asunto de rareza, sólo pasa en México? No, por supuesto. En otros lares pasa algo similar. Pero, finalmente, y sin ser egoístas, nos impacta primero, lo que aquí ocurra.
Y con esa óptica solidaria -que desdeñan u olvidan, los políticos venales-, hacia adentro, en nuestro País, prefieren ser farol de la calle. Mandan víveres y otros apoyos, por lo pronto, a Cuba. Dejando en la duda, en la incertidumbre a los mexicanos. Nos dicen que el FONDEN está “intacto”, y sí, pues no lo usan para lo que se creó: Ayuda a zonas de los desastres naturales. Claro, ahora la garra es para usar los fideicomisos que le han “quitado” al PJF. Y en ese sentido, cabe la pregunta, sí se los retiraron al PJF: ¿Por qué la ministra Piña, lo ofrece en favor de los damnificados de Guerrero? ¿Son sólo “tecnicismos”?
En consecuencia, ya en el rubro del Presupuesto de Egresos para 2024, se dice que no hay fondos de ayuda -presupuesto, pues- ni para la gente de Guerrero, ni para otros que pudieran estar más adelante, en esa lastimosa e indefensa situación. Vaya pues, dirán en MORENA, para qué más, sí son mucho, los 15 mil millones de la SCJN.
Eso sí, las faraónicas obras (además, tildadas de “seguridad nacional”) seguirán chupando dinero y más dinero: ¡El tren maya, no se toca! Podrían gritar los diputados y senadores, al servicio del inquilino de Palacio, no de los mexicanos. Amén de que hay otras preocupaciones que sí ocupan a los morenos: El 2024 y las elecciones, y, claro, quienes serán las candidatas y candidatos, en particular, las primeras, sobre todo, por la rebatinga de la “equidad de género”.
En la sede nacional magenta, ya no encuentran la puerta para resolver ese asunto de las candidaturas y sale a relucir, también, quien tiene el poder político-partidista. Llega a parecer que, incluso, la detentadora del “bastón” anda patinando con el que quiere sea candidato para la ciudad de México. En fin.
En Guanajuato, también hace aire. El más ocupado y ¿Preocupado? Es el exjefe de la Profeco, que ya le mueven el “tapete”, ah, y ese grupo de gentes -políticos o no- que ya se habían apuntado para hacerse de las candidaturas, eso sí, bajo una encuesta, que caray, el método más democrático descubierto e implementado, por el mero mero de los susodichos; van perdiendo el sueño, pues sí su “líder” anda bailando, imaginemos a los suspirantes, ellos, más indefensos.
En Celaya, en ese tema de las futuras y casi inmediatas candidaturas, hay dos que tres que ya rezan sus jaculatorias y prenden sus sirios pascuales, para que no se les vaya a cebar. Aunque la verdad, desde antes, está la “moneda en el aire”.
Nadie, ni don Ricardo, la tienen amarrada. Pero sí, dan ínfulas a las féminas, que la verdad, ya les debe tocar.
Así que, desde Palacio, dicen los que pasan de noche por ahí, que se oye un grito desesperado: ¡Mi lana, mi lana! No faltan los maloras que, como eco, responden, de forma irónica: ¡El tren maya, no se toca! Vaya usted, estimado lector, a creer sí eso es verdad o no. Sin embargo, lo penoso es que hay muy poca consciencia de lo que debemos hacer los ciudadanos, también en gran distracción por otros asuntos de sobrevivencia, pero no, política como les pasa a los morenos. En fin.
¿Qué opinan?
