“Al PAN, explicación con palitos y bolitas”
CONGRUENCIA es la palabra que define todo; si el PAN sigue con la necedad de Marko de volverse PRIAN, va en camino a la extinción. Interesante el debate sostenido entre Xóchitl Gálvez, aspirante a Presidente de México por el Frente Amplio por México y Epigmenio Ibarra, vocero de la 4aT y opino, esbirro de YSQ; coincido con las opiniones que dan el triunfo a la hidalguense, pero, no puedo dejar de notar que Epigmenio se anotó un punto al cuestionar a la “izquierdista y humanista Xóchitl”: Entonces, preguntó: ¿qué haces con Alito, Marko y el Chucho?; y ¡tiene razón!, quien habla de honestidad, vocación de servicio y decencia, no puede ir en alianza, ni ser promovida por Alito y el PRI de Alito, a quien en lo personal considero un capo y un lumpen de la política.
Ahora bien, existe un problema mayor, que Marko y Alito intenten imponer sus alianzas a los estados y municipios que estarán en juego en el 2024 acabando con las bases de lo que queda del PAN; los cito del periódico a.m., febrero 12 del 2023: “El presidente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, dijo que una eventual alianza con PRI y PRD se tiene que dar porque es un acuerdo nacional.” Si bien, Guanajuato parece estar blindado; cito de El Sol de León, escribe Israel Alatorre, 13 de febrero del 2023: “El dirigente del Partido Acción Nacional en el estado de Guanajuato Eduardo López Mares, declaró que el dirigente nacional del PRI Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas, busca subirse a la ola del PAN en Guanajuato y colgarse a la fácil del triunfo en el 2024”… El problema es que el pasado 3 de julio, Lalo López Mares matizó; cito del periódico El Correo, escribe René Fúnez: “…La verdad sería cuestión de revisar con los órganos internos del partido para efecto de que determinemos juntos cuál va a ser la dinámica que se siguen en Guanajuato. Lo que he platicado con el presidente nacional, Marko Cortés, es precisamente eso de que Guanajuato tiene que decir o hacer el chaleco a la medida de lo que corresponde a Guanajuato”, cuando solo tenía que decir: ¡No hay alianza! (punto).
En lo personal opino que Marko, que gusta de meter su cuchara en todo, no tiene vela en el entierro de lo que pase en Guanajuato (asunto del partido y sus militantes) y que la alianza del PAN con el PRI es veneno puro para el blanquiazul, una alianza en Guanajuato sería la puntilla para el PAN a quién le sigue los pasos Morena (no olvidar EdoMex), pues no solo va contra su filosofía y motivación fundacional, sino que de un plumazo carga con 70 años de corrupción antidemocrática y con la #EstafaMaestra, y tira por la borda la lucha y el esfuerzo de miles de militantes que combatieron por sacar al PRI de Guanajuato y de Los Pinos, cosa que trabajosamente se logró en Guanajuato y a nivel nacional se presentó como triunfo histórico al ganar Vicente Fox la presidencia, aunque hoy el, opino, veleidoso, corrupto y corruptor político sea aplaudidor del PRI.
¿Qué sigue?, vuelvo a opinar, siguen los arreglos cupulares para repartirse las migajas del pastel y negociar candidaturas a diputaciones, senadurías y presidencias municipales, donde no tengo duda, Alito se va a comer vivo a Marko; ello a partir de mi convicción de que el 2024, por sentido común lo tiene ganado Morena, me explico: a pesar de la euforia causada por el arribo y la millonaria inversión en propaganda para Xóchitl (que carga con un ladrillo en el pescuezo al aliarse en el Frente (FAM) con Alito), la 4aT tiene 23 de 32 estados bajo control territorial, que es lo que mueve votantes, además tiene al crimen organizado apoyando, como quedó constatado en el 2021, más los programas sociale$ y las becas que nutren un electorado cautivo de millones de personas, ¿dudas?.
Entonces, en mi opinión ¿cuál es el rol para Xóchitl?: 1.- Quitarla de la competencia por CdMx (dónde si hay oportunidad de ganar) y dejarle el camino libre a Marko y sus cuates, 2.- Sumar votos a los partidos de oposición para beneficio de sus pseudolíderes, mientras los ciudadanos cruzamos dedos para que obtengan una mayoría que impida el control del Congreso por parte del gobierno federal y no la usen para chantajear a Morena a cambio de impunidad, y 3.- Como escenario complementario, espero la traición de Alito a la alianza y que Xóchitl sea sacrificada, ya sea como candidata o desde antes, con la manipulación del proceso de selección.
Con todo ello en mente: ¿Cuál sería en mi opinión el mejor camino para Xóchitl?: A.- Perder la candidatura y con la fama adquirida, B.- Jugar por la CdMx por el PAN o por MC; ¿y para México y para el PAN?; 1.- Darle las gracias a Marko, 2.- Acabar con la manipulación tricolor y dar fin a la alianza contranatura y así, 3.- En noviembre (de acuerdo con la ley) lanzar a Xochitl para la CdMX y para “la grande” a un candidato azul de probada honestidad, congruencia y capacidad con chance de ganar (Xóchitl ya demostró que se puede construir una candidatura en semanas) o, alternativamente, si se pierde el 2024 preparar el 2030. Dado que Juan Carlos Romero Hicks se descartó, en mi imaginario quedarían Damián Zepeda y Carlos Medina Plascencia, en lo personal me inclino por el tribuno de Guanajuato que demostró ser un destacado gobernador y un excelente orador… ¡Así de sencillo! Un saludo, una reflexión.
Santiago Heyser Beltrán
Escritor y soñador
