Mientras la dependencia asegura que investiga la infección que surgida en el Hospital General, las familias de las pacientes afectadas no reciben información ni acompañamiento
Mientras la Secretaría de Salud mantiene reserva sobre la investigación relacionada con los contagios de meningitis en el Hospital General de Guanajuato, la única sobreviviente trata de adaptarse a una vida con muchas complicaciones y enfrenta la violación de sus derechos por parte de esta misma dependencia
Casi dos meses después del contagio, la SSG le ha negado a Cristina el acceso a su expediente clínico completo, aunque la Ley General de Salud establece que los pacientes tienen este derecho. También le obstaculizaron a ella y a su familia el acceso al acta de alumbramiento, lo que le impidió por varias semanas poder registrar formalmente a su bebé.
La Secretaría de Salud mantiene una postura de opacidad. Afirman que la investigación continúa en curso con las instancias estatales y federales, pero no se han preocupado por informar a las familias afectadas ni por compartir los avances de la misma, ni tampoco por ofrecer acompañamiento.
Según un análisis de información estadística de quejas médicas del periodo 2017-2020 de la CONAMED sobre atención de ginecología y obstetricia, Guanajuato fue el tercer lugar nacional con más quejas, con un total de 67 procedimientos, sólo por debajo de la Ciudad de México y el Estado de México.
Foto: Especial Cristina sobrevivió al contagio de meningitis en el Hoospital General de Guanajuato
La familia de otra víctima que perdió la vida lucha, pero contra el dolor. Ninguna autoridad de la Secretaría de Salud les ha notificado sobre la existencia de una investigación relacionada con el caso, ni les ha ofrecido apoyo psicológico. También se desconoce la intervención de la Comisión Estatal de Conciliación y Arbitraje Médico (CECAMED).
Fuentes del Hospital General de Guanajuato han confirmado la presencia recurrente de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) después de los contagios. Aunque aceptan que hay visitas de supervisión de rutina, aseguran que después de lo ocurrido, la vigilancia es más frecuente de lo habitual
Sin apoyo ni respuestas, enfrenta sobreviviente dura recuperación
Cuando intenta abrir o cerrar el biberón para su bebé, Cristina enfrenta complicaciones; su madre se da cuenta de que le falta fuerza en las manos. También ha notado las secuelas de la enfermedad que padeció hace más de dos meses, especialmente cuando prepara a sus hijas para que puedan ir a la escuela.
Irene, su madre, menciona que Cristina olvida lo que debe hacer o cómo lo hacía antes de contagiarse de meningitis en el Hospital General de Guanajuato: “no tiene fuerza en las manos, se fatiga mucho cuando salimos a la calle para ir a las consultas, se le olvidan las cosas y tiene mucho dolor en el cuello”, afirma la madre de la paciente de 25 años.
Cristina llegó al hospital el 4 de mayo para una revisión de seguimiento de su embarazo, ya que iba a tener a su tercer hijo. Aunque la fecha de su cesárea estaba programada para tres semanas después, el personal médico decidió adelantar su intervención alegando presión alta, lo cual contradice la versión de su madre, quien asegura que días antes se habían realizado exámenes médicos mostrando un estado de salud favorable.
Llegó por sus propios medios a la clínica, tuvo al bebé y luego comenzó a sentirse mal. Fue trasladada de urgencia desde Guanajuato al Hospital de León debido a su crítico estado de salud.
Foto: Especial Diagnóstico Cristina
En León estuvo internada durante al menos cinco semanas y fue intervenida debido a un absceso de pus en el cerebro causado por la infección. Después de la operación, estuvo en observación durante 21 días para que los médicos pudieran monitorear cualquier efecto o secuela. Esto complicó la situación económica tanto para ella como para su madre, quienes perdieron sus trabajos.
Entre los viajes a León para las revisiones médicas, los medicamentos y las necesidades del bebé recién nacido (como leche y pañales), la familia de Cristina hace esfuerzos extraordinarios cada semana para cubrir los gastos.
Hasta hace muy poco, Cristina pudo registrar el nacimiento de su bebé Eitan, ya que en el Hospital General le negaron varias veces el acceso al acta de alumbramiento. No fue sino hasta que la madre habló con el director del hospital, José Juan Torres Hernández, que pudieron obtenerla, aunque nunca le explicaron el porqué de esta obstaculización.
Por otro lado, en el Hospital de León le han negado el acceso al expediente completo, indicando a la madre de Cristina que se encuentra resguardado en la dirección. Esta situación ha provocado largas esperas en consultas, ya que no se localiza la documentación.
La Ley General de Salud establece en el artículo 77 Bis que los pacientes tienen derecho a conocer su expediente. Además, el artículo 51 Bis de la misma legislación señala que “los usuarios tienen derecho a recibir información suficiente, clara, oportuna y veraz, así como orientación necesaria respecto de su salud y sobre los riesgos y alternativas de los procedimientos, diagnósticos, terapéuticos y quirúrgicos que se les indiquen o apliquen”.
Irene, la madre de Cristina, contempla la posibilidad de denunciar todas las irregularidades en torno al caso de su hija, pero aún no ha conseguido asesoría legal para hacerlo. Solicitó asesoría al Instituto para las Mujeres Guanajuatenses, quienes le sugirieron esperar a que su hija se recupere. La mujer no ha sido informada por las autoridades de salud sobre la investigación en curso ni sobre sus avances.
Ilustración: Juan José L. Plascencia
La familia de Lucía (nombre ficticio), otra víctima que sufrió el mismo contagio al ser intervenida de un tumor benigno en el útero y falleció el 11 de mayo, tampoco ha recibido información sobre la investigación del caso.
La Secretaría de Salud no les ha ofrecido acompañamiento psicológico, por lo que están asumiendo por su cuenta los gastos de terapia psicológica para sobrellevar la pérdida de su familiar.
Tras negligencia, hermetismo y desintereś
A pesar de las dos muertes ocurridas por el contagio de meningitis, la Secretaría de Salud mantiene su postura de hermetismo, ya que las familias de las víctimas no han sido contactadas para informarles sobre la existencia de una investigación ni sobre sus avances.
Entrevistada sobre el tema, la Secretaria de Salud, Ligia Gricelda Arce Padilla, confirmó que hay una investigación en curso que fue notificada a autoridades federales y al Sistema de Vigilancia Epidemiológica local.
“El proceso continúa, se ha hecho la notificación correspondiente a la entidad federal y al Sistema de Vigilancia Epidemiológica. Continuamos trabajando con eso en el Hospital General de Guanajuato y realmente estuvimos en contacto con los familiares cuando estuvieron en nuestras instalaciones”, respondió la funcionaria estatal respecto al tema.
Sostuvo estar impedida para dar más información sobre el tema porque la investigación está en proceso. También indicó desconocer cuándo podría concluir esta revisión.
Foto: Especial Ligia Arce Padilla, secretaria de Salud
Arce Padilla dijo que corresponde a las familias iniciar los procedimientos para solicitar reparaciones de daños o indemnizaciones por la pérdida de sus familiares.
El capítulo nueve de la Ley General de Salud, que hace referencia a los derechos y obligaciones de personas beneficiarias de los servicios públicos de salud, establece en el artículo 77 Bis el derecho a presentar quejas ante los servicios estatales de salud y, en su caso, ante Servicios de Salud del Instituto Mexicano del Seguro Social para el Bienestar (IMSS-BIENESTAR), por la falta o inadecuada prestación de servicios, “así como recibir información acerca de los procedimientos, plazos y formas en que se atenderán las quejas y consultas”..
Para presentar quejas sobre negligencias médicas existen procedimientos en línea en la Comisión Nacional de Arbitraje Médico (CONAMED). En este sitio se solicita a las personas afectadas o a sus familiares llenar un formulario y aportar documentos como un relato de los hechos con firma o huella digital del paciente, copia de credencial vigente del paciente o su representante, y copia de la relación médico-paciente que sustente la queja, por ejemplo, carnet de citas, recetas médicas, notas médicas, hoja de alta, resumen clínico o resultados de exámenes de laboratorio, entre otros.
Datos de quejas médicas sobre atención de ginecología y obstetricia del período 2017-2020 de la CONAMED indican que Guanajuato fue el tercer lugar nacional con más quejas, con un total de 67 procedimientos, sólo por debajo de la Ciudad de México y el Estado de México.
El registro señala que las clínicas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) acumularon la mayor cantidad de quejas, atribuible al volumen de población que atienden. Se menciona un menor número de quejas en los servicios estatales de salud, posiblemente debido a una menor conciencia sobre los derechos entre la población afectada.
Yajaira Gasca Ramírez
@GascaYajaira
Reportera aquí y allá, editora una que otra vez y aspiracionista de la columna
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